Hola a todos , hoy al no haber venido Jesus me veo en la gustosa obligación de narrar la salida dentro de mis limitaciones en lengua. Bueno a la 8:30 estabamos en 2 ruedas Iñaqui y yo, nos tomamos café y tuvimos una conversación , la verdad , triste como esta España, la crisis , el futuro + negro ,el dinero , etc...., y en medio de ella decidimos hacer una ruta hacia onteniente por Alcoy, como Iñaqui conocía el iría delante. En la carretera que va a Jijona, tuvimos la mala suerte de encontrarnos con un control de velocidad ,joderrr, Iñaqui iba delante y yo pegado, para mi ibamos pisando huevos pero resulta que habia un cartel de 60 y nos dijo que habia hecho la foto a uno (Iñaqui le tocó) que iba a 89.Al principio estabamos acojonaos, pero al final quedó en 50 euros, e incluso nos hicimos colegas del poli, que nos dijo que si hubiéramos ido a 90 hubieran sido 300+puntos y nos indicó donde estaba el siguiente radar y que hacia un rato paso una yousun o algo asi de 250 a 127 km/H en tono de risa.
Pues nada la salida ya comenzó torcida y condicionada, Iñaqui que iba delante veía radares por todos lados y policias detrás de cada árbol y señal, e incluso helicópteros con cámaras espia, pasamos la carrasqueta y luego fuimos por una ruta muy bonita hasta Onteniente, allí como dos turistas sin idea no encontrabamos nigún bar para el almuerzo, pa riba pa abajo y de repente vemos un bar y paramos. Entramos y nos gustó, pedimos bocatas y comenzamos a comentar lo ocurrido, de repente el sr. de bar SEBAS TORRO al ver que somos moteros se presenta y nos cuenta su asombrosa historia. Nos dijo que las motos le han arruidado la vida, resulta que su hijo SEBAS TORRO era una promesa del motociclismo español en el 2001 con 13 años ya despuntaba, corria campeonato de España con las estrellas actuales y que el tuvo que financiar con su patrimonio la carrera de su hijo hasta que se empeño tanto que lo ha perdido todo, no ha tenido ayuda de nadie incluso le pidió a su amigo juan carlos ferrero (el tenista) y se la denegó. Nos contó muchas cosas, nos enseñó fotos, e Iñaqui y yo nos dimos cuenta de las injusticias tb en el mundo de las motos, pero ya se sabe para triunfar uno muchos a sufrir. La casualidad quiso que estuvieramos en ese bar cuyo dueño ha tenido tantas motos (tan motero) e incluso enseño a su hijo a ser un campeón, ha sido tan enriquecedor, yo vi a un hombre grande que la vida no le ha tratado bien.
La vuelta ha sido tambien preciosa por cocentaina, villena, despacito y reflexionando . En fin , espero que algún día, el motoclub pueda volver . Un saludo a todos y RAFAGASSSSSSSSSSSSSSSSS.
